Mi más alta vibración

En el camino de ser terapeuta, me he encontrado con un aprendizaje infinito, cada día, cada momento va dejando una lección en mi vida. En un comienzo y como parte de la formación, dado los diversos estudios que he realizado, el leer y adquirir conocimiento es la base, pero llega un momento en donde he tenido que tomar conciencia de la gran responsabilidad que tengo en mis manos, que es sanar y canalizar energía divina de distintas formas, y donde yo actúo como un canal, el cual debe estar limpio y con una vibración tan alta que permita lograr una conexión espiritual con el paciente y en coordinación con el universo.

En principio, llegar a esta alta vibración resulta una responsabilidad, adquirida en mi rol de terapeuta, pero con el tiempo es un regalo a mi cuerpo, mi espíritu y mi mente, ya que esta vibración me ha permitido conectarme con todo, sentirme más feliz, calmar mi mente y elevar mi nivel espiritual.

Este proceso de limpieza ha considerado muchos aspectos, les mencionaré algunos, para que puedan tener en mente, no sólo para las personas que están interesadas en seguir un camino como terapeuta, sino también para poder relacionarnos de mejor forma con el todo que nos rodea y acércanos a un estado de plenitud.

1. Personalmente, lo más difícil para mí, ha sido dejar algunos vicios. Todas las drogas como el tabaco, alcohol u otras más fuertes nos debilitan vibracionalmente, además de generar perforaciones en nuestro aura, provocando el ingreso de malas energías. Debemos ser conscientes de esto si trabajamos con terapias o simplemente por nosotros mismos. Cuidado cuando se deja de tomar alcohol, ya que al aumentar nuestra vibración, nuestra percepción de todo también aumenta, lo que me sucede a veces es que una cerveza o un sour es suficiente para toda una noche, ya que mi cuerpo no resiste más.

2. Como he mencionado en columnas anteriores, ser feliz con todo lo que nos rodea, agradecer y entregar lo más bello de nosotros mismos al resto. Ser feliz con el éxito de las demás personas y llenarnos de buenos deseos.

3. La alimentación también es difícil cuando no se tiene mucho tiempo, entre clases de yoga, estar a cargo de un equipo, liderar un spa, escribir, estudiar y otros proyectos, tener tiempo para cocinar saludable resulta complicado, pero tener alimentos clave en consideración nos puede salvar en momentos críticos (cereales, legumbres, huevos, frutas y verduras). Somos lo que comemos!

4. La práctica de yoga nos entrega miles de beneficios, esto da para una nota aparte, pero bueno, nunca esta demás decir, que el trabajo no es sólo físico, sino también espiritual.

5. Leer, estar constantemente actualizándose y alimentando la mente, nos permite ser más cultos y conectados.

Tengamos en consideración, que el tiempo de este proceso es distinto para todos, no es una competencia, sólo disfrutemos cada uno nuestro proceso. Namaste.